Un juez de La Matanza se convirtió en el primer magistrado en dictar un fallo de primera instancia que absuelve de culpa y cargo a una persona llevada a juicio por posesión de marihuana.
Se trata del Juez Franco Fiumara (!), quien en carácter de Juez Unipersonal, integrante del Tribunal en lo Criminal Nº 4 del Departamento Judicial La Matanza, absolivió a Maximiliano Rubén Figueroa, de 30 años, acusado como autor penalmente responsable del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, hecho penado en el artículo Nº 5, de la Ley 23.737.
Fiumara determinó que las cantidades secuestradas a Figueroa evidenciaban una finalidad de consumo personal y que de ninguna manera podía interpretarse que llegara a comercializar tan pequeñas cantidades -se lo fumaba todo él (?)-.
Como era de esperar, Fiumara se basó fallo “Arriola”, recientemente emanado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, en el cual se resolvió dictar la inconstitucionalidad del artículo 14 de la ley 23.737.
Al igual que la sentencia citada, Fiumara propone limitar la injerencia del Estado en la intimidad de los individuos tal como fuera el espíritu originario de la Carta Magna de 1853, donde de porro no dice nada (bueh, esto último lo agregué yo).
Así que ya saben, aquellos jueces que se apelliden Fumanchu (?), Porreti (?) o Fasola, pueden seguir el ejemplo de Fiumara y dejarse de perseguir a perejiles.
Se trata del Juez Franco Fiumara (!), quien en carácter de Juez Unipersonal, integrante del Tribunal en lo Criminal Nº 4 del Departamento Judicial La Matanza, absolivió a Maximiliano Rubén Figueroa, de 30 años, acusado como autor penalmente responsable del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, hecho penado en el artículo Nº 5, de la Ley 23.737.
Fiumara determinó que las cantidades secuestradas a Figueroa evidenciaban una finalidad de consumo personal y que de ninguna manera podía interpretarse que llegara a comercializar tan pequeñas cantidades -se lo fumaba todo él (?)-.
Como era de esperar, Fiumara se basó fallo “Arriola”, recientemente emanado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, en el cual se resolvió dictar la inconstitucionalidad del artículo 14 de la ley 23.737.
Al igual que la sentencia citada, Fiumara propone limitar la injerencia del Estado en la intimidad de los individuos tal como fuera el espíritu originario de la Carta Magna de 1853, donde de porro no dice nada (bueh, esto último lo agregué yo).
Así que ya saben, aquellos jueces que se apelliden Fumanchu (?), Porreti (?) o Fasola, pueden seguir el ejemplo de Fiumara y dejarse de perseguir a perejiles.
vía El 1 Digital
Comentarios
Esta bien ponerle humor...pero de ahi a tomarlo en joda?
Cuando te plantes en la ventanita del quiosco y quieras comprar cerveza ojo con pedir un porron...